Los siniestros pueden darse en cualquier momento y muchas veces, con los nervios, no sabemos cómo debemos de actuar.
Una vez que se ha producido el accidente, debemos de rellenar el parte amistoso, aunque el accidente no haya sido grave, y es recomendable que el mismo se rellene en el lugar en el que ha sucedido el accidente, a fin de poder completarlo con todos los datos y determinar cuál ha sido la mecánica del accidente, localizando los daños que se hayan podido ocasionar en los vehículos, algo fundamental para poder determinar la culpa en el caso de que haya dudas de quién la haya podido tener.
Asimismo, el parte amistoso ha de ir firmado por ambos conductores en la parte inferior, si han sido dos los implicados, porque si hay más implicados en el accidente también hay que hacerlo constar y deben de hacerse más partes amistosos.
En el caso de que, además de que haya lesiones en algunos de los implicados o surga cualquier inconveniente, como puede ser que el conductor contrario no quiera asumir su culpa o esté bajo los efectos del alcohol, es preferible solicitar la presencia de la Policía.
Posteriormente, al realizar todos los trámites que hemos citado hasta ahora, siempre hay que acudir al médico o al hospital inmediatamente después del siniestro, o en un momento muy reciente el mismo día, si el accidente ha causado lesiones, ya que por muy débiles que parezcan, para poder acreditar el nexo causal entre el accidente que hayas podido sufrir y dichas lesiones, es fundamental un parte médico de primera asistencia.
En relación con nuestra aseguradora, hemos de comunicarles el accidente en un plazo máximo de siete días desde la fecha del siniestro.
Cuando hemos sufrido lesiones, el parte médico de primera asistencia, citado anteriormente, lo remiten de oficio al Juzgado de Instrucción que este de guardia en ese momento. En los meses posteriores, nos llegará a casa una resolución judicial para interponer la correspondiente denuncia por nuestras lesiones, teniendo un plazo de 6 meses desde que te notifican dicha resolución.
Si las lesiones no han sido graves, lo preferible es interponer una demanda ante el Juzgado de Primera Instancia para reclamar las cantidades derivadas del siniestro, en el hipotético caso de que no hayamos podido llegar a un acuerdo extrajudicial con la aseguradora de la persona que haya sido la culpable en el accidente.
En relación a la defensa jurídica, para que un abogado sea el que tramite la reclamación de las cantidades derivadas del accidente, en la mayoría de seguros de coche a todo riesgo o incluso en algunos seguros a terceros, se incluye la cobertura de defensa jurídica, por ello es conveniente que antes de interponer la demanda o la denuncia comprobemos si tenemos dicha cobertura. La cobertura de defensa jurídica ofrece la libertad al asegurado de elegir el abogado y el procurador que quiere que le represente, sin que sea obligatorio aceptar a los profesionales de la compañía aseguradora.
Cuando se produce daño o lesión en alguno de los ocupantes es conveniente que cuando se acuda al médico, especialistas, tratamiento, rehabilitación, operación o curas se pidan justificantes, que servirán posteriormente para elaborar la reclamación de la indemnización.
Es importante que se conserven todos los justificantes, informes y facturas relativas a los gastos médicos que se hayan podido generar. También se pueden incluir los gastos en desplazamiento durante el tiempo de rehabilitación.
Preguntas frecuentes después de sufrir accidente de tráfico:
- ¿Quién tiene derecho a reclamar una indemnización?
- ¿Qué tipo de daños son indemnizables? ¿Qué daños personales, daños materiales, gastos, etc?
- ¿Cuál es la diferencia entre días de baja impeditiva o días de baja no impeditiva?
- ¿Qué vías debo seguir para reclamar mi indemnización?
- ¿Tienes alguna duda más sobre lo que hay que hacer si tiene un accidente de coche?
CINTAS & ASOCIADOS ABOGADOS
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